A continuación te presentamos algunos consejos para el cuidado del cabello. Estos consejos y trucos podrás ser aplicados por cualquier persona diariamente.
Todo comienza en la ducha. Cepilla bien tus cabellos antes de lavarlos para activar la circulación. Evita en todo lo posible el agua caliente, ya que ésta elimina la capa protectora del cabello (un tipo de grasa natural). Finaliza el lavado de nuestro cabello, de preferencia, con un chorro de agua fría.
El calor y las altas temperaturas, un gran enemigo
Invierte en protector térmico para evitar el daño por calor.
No coloques la secadora en la misma zona de cabello durante más de 5 segundos. Aplica el aire frío para fijar el peinado.
Tanto cuando uses una plancha para el cabello como una secadora, haz movimientos lentos y constantes, siempre en la dirección desde la raíz hasta la punta.
No olvides hidratar correctamente tu cabello. Distribuye la crema hidratante desde la punta de tu cabello hasta antes de llegar a la raíz, espera unos minutos a que el producto actúe y enjuague con agua tibia, casi fría y por último asegúrate de eliminar todos los residuos de la crema ya que de lo contrario pueden obstruir los poros de nuestro cuero cabelludo y generar problemas a largo plazo.
Adopta hábitos sencillos que dan resultados
La alimentación es esencial para el cuidado de nuestro cabello. Consume en porciones saludables huevos, carne y leche. Son excelentes fuentes de proteína, nutriente que es importante para la salud de nuestro cabello. Así mismo, consume granos enteros; los cuales son ricos en vitaminas del complejo B que nutren el cuero cabelludo
No utilices con demasiada frecuencia peines demasiado finos ya que suelen dañar la fibra capilar.
No duermas con el pelo húmedo, es recomendable déjalo secar libremente o suavemente con una toalla, realizando una especie de masaje en el cuero cabelludo.
Aprender a diferenciar los productos
Emplea productos cosméticos específicos para tu tipo de cabello. Además, acostúmbrate a leer los elementos que contiene cada producto, así como las especificaciones de su uso, esto evitará que maltratemos nuestro cabello o que empleemos productos de baja calidad que puedan repercutir en nuestra salud.
En ocasiones, si adquirimos una serie de productos de la misma línea o marca, pueden funcionar mejor si los usamos juntos.
El champú antirresiduos se debe utilizar cada dos semanas para las personas con cabellos grasos, densos y dañados. Sin embargo, si consideramos que nuestro cabello se encuentra en un óptimo estado de salud, podemos evitar utilizarlo y simplemente acostumbrarnos a enjuagar de manera correcta tanto nuestro cabello, como nuestro cuero cabelludo.
El cabello reseco o frágil se debe lavar con champú con pH más ácido (entre 4,5 y 5,5); o, en su defecto, con un champú neutro.
¿Quieres ganar más volumen? Utiliza un champú con un pH alto; esto hará que tu cabella adquiera una apariencia de mayor volumen.